¿Cómo Me Imagino el 7 de Octubre y, Sobre Todo, el Lunes 8?
Aunque sea un lugar común trilladísimo -valga
la redundancia- decir que el domingo 7 de octubre no será un día cualquiera
para la vida de los venezolanos; no puedo dejar de decirlo. Mi ansiedad en
estos últimos días antes de la tan esperada fecha, no me permite concentrarme
en otras cosas. No duermo bien, me distraigo, siento que mi optimismo es
bipolar. Y me pregunto a cada rato: ¿Cómo me imagino el día y la larga noche
del 7 y la mañana del 8?
El día me lo imagino votando bien temprano -un
poco adolorido después de haber corrido 20 millas el día anterior- socializando
con todos lo venezolanos panas que vayan a votar a la embajada de Venezuela en
Washington, DC., revisando el iPhone cada 5 segundo para estar al tanto de lo último, explicándole a mi querida Kate
-mi novia gringa- el realismo mágico de este proceso trascendental, haciendo
chistes malos -como de costumbre- y preparándome para la noche.
La noche me la imagino larga, muy larga -gracias
a Dios, por estos lares el lunes es feriado-; con el remix adicional de que los
Nationals jugarán su primer partido
de playoff de la historia, lo que me mantendrá entretenido por un rato –me
imagino revisando el iPhone sólo cada 20 segundos- y cuando termine el juego,
me imagino incrédulo –ahora sí entregado de lleno al iPhone, iPad, computadora,
radio y afines- de todas bolas que hayan rodado hasta esa hora. Aunque no tengo
ni Twitter ni Facebook, me imagino pegado al Twitter y al Facebook de los panas
que estarán tomándose unas sufridas cervezas conmigo. Me imagino lo útiles, estresantes y peligrosas que se pueden tornar
estas redes sociales cuando la incertidumbre agobie.
En la madrugada me imagino extrañando a Aldo
más que nunca, porque se nos fue sin haber podido disfrutar y sufrir este
momento histórico con todos nosotros.
La mañana del lunes es lo que más me cuesta imaginar. He vivido muchas mañanas de lunes, pero no me imagino una mañana como la del lunes 8 de octubre, porque todo es tan impredecible en este realismo mágico que Kate no entiende, que es difícil imaginarse cuán hermosa podrá ser esa mañana de ese lunes.
La mañana del lunes es lo que más me cuesta imaginar. He vivido muchas mañanas de lunes, pero no me imagino una mañana como la del lunes 8 de octubre, porque todo es tan impredecible en este realismo mágico que Kate no entiende, que es difícil imaginarse cuán hermosa podrá ser esa mañana de ese lunes.
Ciro
6 comentarios:
Amen Ciro, AMEN!!!
Todos soñamos con esa mañana hermosa del lunes 8 de octubre...
tienes novia ciro
desde cuando
sucio
La verdad es q la noche del domingo puede ser muy larga; todavía recuerdo la imagen de la mesa en el CNE por horas en las últimas elecciones...
Como dijo Javier: Amén Ciro, amén!!
Mientras mas soñemos con esa hermosa mañana del 8 de Octubre..mas chance tendremos de hacerla realidad.. que ANSIEDAD la vigilia se acerca..
por lo que leo no vas a extrañar a más nadie...
tantas elecciones juntos y así nos desprecias, buehhhh
Publicar un comentario