viernes, agosto 28, 2009

Gobernantes y la Educación Pública


En la Venezuela de mis padres, los colegios públicos eran mejores que los privados (en general). Cuando yo empecé la educación primaria en Caracas,- Venezuela -, los colegios privados tenían más fama de ofrecer una educación de mayor calidad (por allá por los 70s…). Eso se corroboraba al ver que el porcentaje de alumnos de colegios privados que entraban en las universidad públicas era mayor (mayores notas y mejores resultados en pruebas de aptitud académica) que aquellos que venían de liceos públicos, siendo estos últimos los que mayor población estudiantil tenían en Venezuela. La diferencia era mayor con el porcentaje de alumnos graduados.

Dice mucho de la calidad de un sistema educacional público, el hecho de que los hijos de los gobernantes estén o no inscritos en alguna escuela de estos.

En Venezuela desde que tengo uso de razón la mayoría de los hijos de los gobernantes han ido a colegios privados en Venezuela o en el exterior. Los gobernantes no creen en el sistema de educación que ellos mismos dotan, diseñan y organizan. El pueblo les ha dado la gran responsabilidad de subir la calidad de la educación y el nivel académico de los estudiantes.

En el imperio, Jimmy Carter fue el último presidente gringo en llevar a sus hijos a colegios públicos en Washington DC.

El presidente Obama lleva a sus hijas al colegio privado super-recontra-maxi-archi-mega-vergatario elitista Sidwell Friends donde la crema y nata de la capital del imperio del mal lleva a sus hijos a estudiar. La llaman la "Harvard de las escuelas privadas de Washington DC". Aquí vinieron y vienen los hijos y nietos de los presidentes Theodore Roosevelt, Richard Nixon, Bill Clinton y del ex Vice-Presidente Al Gore y del actual Vice-Presidente Joe Biden.

El Alcalde de Washington Adrian Fenty (un amante de los triatlones y carreras de distancia) tuvo a sus hijos en colegios privados hasta 3er grado. Este año sus hijos gemelos fueron al mejor colegio público de Washington DC llamado Escuela Básica Lafayette. El detallito es que aquí, en el imperio de mal, por logística, organización y comodidad tienes que ir al colegio público de tu área. La única forma de ir a otro liceo público que no sea de tu área y por ende no te toque por ley, es que te ganes una especie de "lotería" y te asignen a ese liceo público. El sistema educacional de Washington DC (y USA en general) no tiene una buena calidad uniforme. Por eso, el valor de las casas varía dependiendo de la calidad del liceo que te corresponde. Tu dirección determina el billete a pagar por una casa.

Al parecer Fenty no se ganó la lotería y recibió un "tratamiento especial" y lo ridículo de su rueda de prensa tratando de explicar como lo hizo, levanta suspicacia.

Lo cierto es que el alcalde Fenty, como cualquier ser humano quiere lo mejor para sus hijos y lo mejor no está en este caso en lo que predica necesariamente. Simplemente no puede confiar en su sistema público porque todavía hay muchos liceos deficientes.

En Venezuela, durante los gobiernos de Chávez, se ,diseñaron las escuelas bolivarianas que supuestamente mejoraron el sistema público de educación. Ahora vienen nuevas leyes de educación (que fueron rechazadas por el pueblo en un referendo organizado por el gobierno) que buscan adoctrinar a nuestros niños (esto dicho por el Presidente Chavez).

Estos intentos de mejorar la educación, que llevan consigo una inmensa propaganda gubernamental, no evita sin embargo que los hijos de los líderes de la Revolución estudien en los mejores colegios privados de Caracas, - hasta hoy poco salpicados por el lavado cerebral que intenta meterle este gobierno a nuestros hijos.

En Venezuela, simplemente el gobernante no confía en el sistema educacional "socialista" que el mismo promociona.

Perdónenme el francés, pero ni guevones que fueran.


El Pollo








miércoles, agosto 26, 2009

¿Cuál es la Diferencia entre Chomsky y una Puta Cara?


Cuando en los ya lejanos finales de los 80/principios de los 90, estudiábamos en la Escuela de Idiomas de nuestra querida UCV, la teoría generativista de Noam Chomsky, nos impactaba. Aquella vaina de que había “un conjunto de principios lingüísticos innatos compartidos por todos los seres humanos” nos ponía a pensar y a tripear. Yo me decía: “ese pana tiene que ser un güevo pelao por todas estas teorías y por ser el padre de la lingüística moderna”.

20 años más tarde, ya no lingüista, sino convertido en activista político, intelectual anticapitalista y profesor emérito del -muy elitesco y nada socialista- Massachusetts Institute of Tecnology (MIT), en la elitesca ciudad de Boston, fue a Caracas a aleccionarnos sobre las bondades de la revolución bolivariana.

Cualquiera puede tener la posición política que le dé la puta gana; pero al ser Chomsky parte de la élite del Imperio y llegar de paracaidista a un país del que lo poco que sabe es que su presidente “socialista” lo ayudó a que unos de sus panfletos antigringos se convirtiera en best seller y produjera millones de dólares -oh paradoja-, lo mínimo que le puede dar a uno que lo admiró como lingüista es pena ajena y lástima.

Y la pena ajena y la lástima no están asociadas exclusivamente a la perorata que se lanzó en el -golpeado- Teresa Carreño, sino al reunirse con Chávez que lo dio por muerto cuando mencionó el panfleto de marras en la ONU en el 2006.

Porque seamos serios; si alguien lo “admira intelectualmente” a uno, y el hijo de puta no sabe siquiera si estás vivo o muerto, dudo que ese “admirador” se haya leído, al menos, el prólogo de uno mis libros.

Pero como por la plata baila la mona y Chávez -siempre tan bueno para el marketing de los intelectuales trasnochados; sin alusiones personales Galeano- hizo bien su trabajo capitalista al hacer que “Hegemonía o Supervivencia” aumentara los ceros en la cuenta corriente de Mr. Chomsky, el otrora padre de la lingüística moderna, le pagó el favor al panita revolucionario adulándolo en Miraflores con perlitas del calibre de “ser una influencia positiva y propiciar cambios inspiradores”.

Triste que Chomsky haya pasado de ser un güevo pelao a ser un güevón pelao, políticamente hablando.

Y me pregunto: ¿Cuál es la diferencia entre Chomsky y una puta cara?

Ciro

lunes, agosto 24, 2009

Así Dijo: "Miss Universo" Stefanía Fernández Krupij




"...fue horrible, proxima a cumplir 15 años me dijeron: - secuestraron a tu padre !

... logró escapar y me dijo: - hija yo pensaba que no iba estar en tus quince años...

... tantas cosas que pasan en la vida y no le dices un te amo o un te quiero muchas veces a tus padres...

allí fue cuando entendí que era realmente importante en la vida...

dedicarle esos minuticos que tienes con tu familia, decirles cuánto los quieres...

ahí me sentí una gran mujer."

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